| DESCRIPCIÓN
              DE LA RUTA   
            Partiendo en coche desde Villarreal de San Carlos con dirección a
            Trujillo, a 2 ó 3 km. e inmediatamente después de cruzado el
            puente sobre el río Tajo hay una entrada a la izquierda donde
            dejaremos el coche.    La
            senda, situada al lado de la fuente del Francés (denominada
            así en homenaje a un ciudadano francés que murió ahogado en el
            río Tajo intentando salvar un ave), comienza con subidas fuertes
            para ir suavizándose poco a poco. Dos o tres veces pasaremos por
            claros y pedreras dentro de la espesura de la ruta. Esta espesura es
            producto de la ausencia de luz (de ahí su nombre: La Umbría).    Conforme
            vamos subiendo la vegetación va cambiando paulatinamente. Empezamos
            a tener mejor perspectiva de la zona: a nuestra derecha está el Cerro
            Gemio, al frente se presenta Peña Falcón (a veces,
            desde este descomunal roquedo algunos buitres sobrevuelan muy bajito
            nuestr recorrido) y a la izquierda ya va apareciendo nuestra meta:
            El Castillo de Monfragüe, que en unos minutos estará ante nuestros
            ojos (Tiempo aproximado: 45 min/ida).    Con una
            torre circular -en ruinas- y una cuadrada -reconstruída para la
            contemplación del paisaje- el castillo se alza, junto a la ermita,
            en lo alto del monte.    Esta
            visita también es posible en coche. Se realiza por el lado
            contrario a la Umbría (La Solana, por supuesto), con el
            sólo esfuerzo de subir unos cuantos peldaños.    Si
            queremos alargar la travesía, podemos empezar la ruta en el mismo
            pueblo de Villareal, bajando por la calzada romana, contemplando la
            unión del río Tiétar y el Tajo, y atravesando el río por el
            puente del Cardenal hasta llegar a la fuente del Francés. De todas
            maneras es conveniente pedir permiso al guardaparques, pues en
            determinadas épocas es desaconsejable (las compuertas del embalse
            se abren sin avisar). |